El joven jugador del Liverpool falleció en un accidente de tránsito ocurrido en la provincia española de Zamora
Diogo Jota, futbolista del Liverpool y la selección de Portugal, de 28 años, murió en la madrugada de este jueves en un accidente de tránsito en la provincia de Zamora en España.
En el mismo vehículo en el que viajaba Diogo Jota también iba su hermano André, de 26 años, quien también perdió la vida en el accidente.
El jugador del Liverpool falleció luego de que el vehículo en el que viajaba se saliera de la ruta e impactara contra un árbol tras lo cual se prendió fuego e inició un incendio en la zona.
De acuerdo con los testigos de accidente, el vehículo quedó envuelto en llamas y rápidamente se propagaron a la vegetación lindera. De acuerdo con las primeras versiones uno de los neumáticos del Lamborghini en que viajaban los hermanos, pudo haber pinchado por lo que el conductor habría perdido el control del vehículo que se salió de la ruta.
Diogo Jota, padre de tres pequeños niños, se había casado apenas 10 días atrás con su prometida Rute Cardoso.
Diogo Jota en el fútbol
Jota llegó al Liverpool en 2020 procedente del Wolverhampton a cambio de 44,7 millones de euros. Desde entonces había disputado 182 partidos con los 'reds' en los que marcó 65 goles y anotó 26 asistencias. En ese tiempo conquistó tres títulos: una Premier (2024-25); una FA Cup (2021-22) y una Copa de la Liga (2021-22).
El internacional portugués tuvo un breve paso por el Atlético Madrid. Marcó en un amistoso contra el Crotone (0-2), pero no debutó nunca en un partido oficial. Ese mismo verano se marchó cedido al Oporto. Luego saldría, también a préstamo, al Wolverhampton antes de marcharse traspasado definitivamente en 2018 por 14 millones.
En la selección portuguesa, Jota debutó en 2019 y ha formado parte de la nueva generación que acompaña a Cristiano Ronaldo en las últimas competiciones internacionales. Disputó la Eurocopa 2020 y el Mundial de Qatar 2022, aunque una lesión le impidió estar presente en parte de las fases clasificatorias. Su presencia en el ataque luso aportó dinamismo y profundidad, con un perfil de delantero que se adapta tanto al juego de posesión como al contragolpe.